La maldición del fantasma

 

Era un día, dos niños  llamados Miguel y Ángela que fueron a pedir caramelos a una

casa, era un día de Halloween. Cuando llamaron a la puerta se abrió y había un señor

y dijo con voz rara:

-Entrad chicos, tengo muchos caramelos. Los chicos entraron a la casa con intención

de conseguir muchos caramelos. Más tarde, el hombre los encerró en una habitación

y luego el fantasma los durmió y les quitó el alma y las chuches. Pasó un año y volvió

a ser Halloween, los niños se despertaron sin alma. El fantasma vino con ayuda de

sus compinches: ,la bruja y el vampiro.

Los niños se asustaron mucho e intentaron recuperar su alma y sus caramelos.

La bruja convenció al fantasma de que le dara a elegir, o los caramelos o su

alma. Los niños querían las dos cosas: Su alma y sus caramelos y se los devolvieron

pero con una condición que no le digan a nadie lo que había pasado.

Por Miguel y Ángela