Había una vez un niño
que era muy gracioso llamado Saltarín que vivía en Hawai. Ese niño era especial
porque siempre le ocurrían cosas muy raras como por
ejemplo, un buen día iba corriendo por el campo y se encontró un duendecito que era muy mono pero tomo otra forma terrible que le mordió la
nariz y se le cayó en el pie de lleno.Pero cuando llego su octavo cumpleaños se
dieron cuenta de que si ayudara se eliminaría su mala suerte y seria un niño
normal.
Unai
chulisimo
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